El juego de decisiones con narrativa social y política, sobre adolescentes que intentan cruzar la frontera, llega a consolas.
DigixArt y Ravescourt públicaron este jueves 14 de abril, Road 96 para PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One y Xbox S|X. El juego había llegado el 16 de agosto del año pasado a PC y Nintendo Switch.
ROAD 96 no solo mezcla una gran narrativa y un gameplay fresco, si no que logra incorporar dentro distintas mecánicas que enriquecen la experiencia del juego. Un juego de decisiones con una narrativa tan buena, que algún punto conseguirá llamar a la empatía.
La historia en la gira el juego no es sobre una persona en particular, si no sobre un país llamado PETRIA que es controlado en todos sus aspectos y niveles de poder por un presidente tirano llamado casualmente Tyrak, que usa la fuerza para opacar todas las protestas en su contra.
Teniendo esto como premisa, es de entender que los habitantes de este país quieran escapar en busca de libertad y un mejor futuro, sobre todo si son adolescentes. Es por eso que esta historia tiene diversos aspectos por conocerse con cada una de nuestras decisiones y por diferentes personajes.
Las mecánicas de juego que maneja Road 96 permite que no sea una experiencia cuadrada y brinda muchas horas de diversión, algo que sin importar como quieras dirigir el camino será muy interesante. Lo más importante en la experiencia del juego es sin dudas la opción de elegir como irá la historia, lo que implica que como jugador deberemos de elegir la respuesta más idónea a nuestro parecer, ya que durante el transcurso del juego estás respuestas nos irán conduciendo a diferentes momentos y a diferentes situaciones, tanto para el personaje que nos acompañe, como para el personaje “protagonista” del capítulo.
Encarnaremos a un adolescente cualquiera, que se enrumbará por la carretera, buscando llegar a la frontera y cruzarla. Depende de nuestras decisiones y el punto de partida del personaje, tendremos diversos puntos de parada donde interactuaremos con personajes y viviremos pequeñas aventuras que pueden ayudar o obstaculizar nuestro camino a la frontera.
Este viaje durará un promedio de una hora y cuando lo terminemos, pasaremos a usar a otro personaje, que desde un punto de partida distinto, tendrá la misma meta. Lo interesante de este nuevo viaje es que nos cruzaremos con casi los mismos personajes de nuestra anterior aventura, pero en puntos cronológicos distintos, por lo que mientras más juguemos, más conoceremos qué sucedió con estos personajes secundarios.
Cada personaje empezará con una distinta barra de energía y una cantidad mínima de dinero. Nosotros deberemos preocuparnos en nuestro camino por comer, descansar y conseguir dinero, ya sea trabajando o tal vez robando. Todas nuestras acciones tendrán consecuencias y no necesariamente por portarnos bien, nos va a ir mejor en nuestro camino. Es mejor robar con la seguridad de que no te van a descubrir e ir por la ruta en bus, que hacer si un dólar y avanzando a dedo. Entre los personajes secundarios que encontraremos en la ruta, tendremos un taxista misterioso, dos ladrones, una policía, una periodista vendida, un niño geek tecnológico, otra adolescente en busca de cruzar la frontera y al líder de un grupo de protestas.
El juego se desarrolla como una aventura en primera persona. Cada parada es una pequeña zona en la que podemos movernos libremente. La mecánica que toma más importante es de elección donde en cada respuesta estaremos inclinando la balanza de nuestro destino hacia un lado distinto. También tiene ciertas mecánicas point and click en los que deberemos buscar pistas u objetos escondidos.
En nuestro viaje encontraremos distintos minijuegos, que van desde un juego de Pong en una recreativa, pasando por un juego de mesa, hasta más elaborados como trabajar de coctelero en un bar o ayudar a Sonia siendo su camarógrafo.
Road 96 es un juego que invita al usuario a ser protestante. Definitivamente nos pondrán en una posición donde claramente está en contra del Gobierno autoritario de turno. Se nos propondrán diversos puntos de vista para finalmente tomar la elección que más nos parezca conveniente ¿Se trata solo de huir? ¿Flores significará el cambio? ¿La violencia es justificada para luchar contra el Gobierno autoritario? ¿Escapamos solos o ayudamos a alguien a cruzar también? ¿Retrocedemos por esa persona? ¿Confiamos en tal persona? Son una de las cuantas preguntas que nos haremos en el transcurso del juego.
Gráficamente el juego tiene un estilo medio dibujo animado americano cuando se intenta recrear humanos lo más naturalmente posible. Tiene un cierto aire a Life is Strange, pero sin tener detalles tan marcados. Los escenarios aunque no sean fotorrealistas, están cargados de detalles y efectos que lo convierten visualmente en un juego muy disfrutable. Al no ser un juego que requiera mucho punche gráfico, está de más decir que tendremos 4K con 60 fps, garantizados en todo momento.
Respecto al sonido, el juego brilla por su soundtrack indie que acompaña de manera perfecta al juego, consiguiendo intensificar y transmitir emociones, cuando estos toman protagonismo. El tema principal del juego, la canción “portada” es The Road, interpretada por la banda francesa Cocoon, es un claro ejemplo de eso, canción perfecta para transmitir la idea central del juego.
Conclusión:
Un título con carga política en el que jugadores de toda parte del mundo se podrían identificar en distintos grados. Un juego que pese a no innovar en lo jugable, envuelto como un todo, consigue sobresalir por ser una propuesta distinta y fresca. Nos gustaría ver más entregas y sobre todo ver como funcionaría una secuela con niveles de producción a lo Detroit Become Human u otros juegos de decisiones Triple A.
Lo bueno:
- Unir las piezas de la historia de los personajes no jugables
- Soundtrack maravilloso
- Se atreve a tocar temas políticos y sociales, pero no de manera tan profunda. Lo suficiente para un público juvenil
- Cada partida puede completarse en una hora
Lo malo:
- Al no tener personalidad y al no poder verlos, los protagonistas en vez de ser estos adolescentes que intentan cruzar la frontera, terminan siendo los personajes secundarios.
90/100
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