Análisis: EA Sports WRC

  Esta entrega totalmente nueva supone un cambio radical no solamente en la casa desarrolladora, sino en la concepción general de lo que significa un torneo de este tipo.





Escribe: Retrotripped

Ya tenemos entre nosotros a EA Sports WRC, un videojuego de carreras de autos en formato rally que podría suponer una secuela espiritual del bien conocido Colin McRae. Esta entrega totalmente nueva supone un cambio radical no solamente en la casa desarrolladora, sino en la concepción general de lo que significa un torneo de este tipo. Es un videojuego oficial y licenciado por la FIA (la Federación internacional del Automóvil, para los menos enterados) pero... ¿estará a la altura?

AÑOS DE TRAYECTORIA

Aunque EA Sports WRC se vende como una saga totalmente nueva, no es precisamente esa su definición. Durante casi 15 años, Kylotonn Games (un estudio de desarrollo de videojuegos francés) tuvo posesión de la licencia WRC y lograron hasta siete títulos diferentes, siendo el WRC Generations (2022) el último esfuerzo de esta alianza. El traspaso de la licencia a manos de EA permitió que Codemasters, desarrolladora de videojuegos que tiene en su haber más de una decena de títulos dedicados a la F1, tomara la posta e introdujera muchas de las mecánicas a las que nos tienen acostumbrados los juegos de simulación.

A diferencia de sus “predecesores”, EA Sports WRC nos da la posibilidad no solamente de ser un piloto de rally sino también de gestionar nuestro propio equipo desde su concepción (creación de identidad y marca) hasta su composición (gestión de gastos y contratación de personal).



¿OTRO JUEGO DE CARRERAS DE AUTOS?

Sí, pero no. EA tiene en su portafolio innumerables títulos de carreras de autos. Repasando la lista rápidamente podemos contar a Need For Speed, Burnout, Real Racing, la saga F1 y Dirt (sin contar los menos conocidos o descontinuados, claro está). Con toda esta trayectoria, es increíble que aún puedan aflorar ideas totalmente nuevas como las que se lograron implementar en EA Sports WRC.

Y es que podemos decir que estamos ante la concepción de un F1, pero con un tono un poco más salvaje y menos acartonado.

Este título es simulación pura y dura e intenta ceñirse lo mejor posible a las reglas oficiales del campeonato del mismo nombre, en el mundo real. Todo, desde el peso del carro, las condiciones atmosféricas, tu horario de partida y demás características están pensadas para que conozcas a fondo todo sobre este deporte.

No podemos dejar de mencionar las enormes posibilidades que tenemos en este título, pues contamos con casi 70 autos oficiales y cerca de 1000 kilómetros de recorrido repartidos entre todos sus circuitos.




DESAPRENDER LO APRENDIDO

Es importante reconocer que los primeros minutos en este juego pueden ser caóticos y complicados. Más aún si uno viene acostumbrado de otros juegos de carrera en donde solo se pisa el acelerador y ya.

La respuesta del control es muy precisa y eso es importante porque, al menos si juegas en consola, será NECESARIO Y VITAL que sepas ajustar la presión de los gatillos de una manera óptima. No se trata de solo presionar a fondo, sino de medir qué tan fuerte y cuándo hacerlo.

Al mismo tiempo, los joysticks responden muy bien al punto de reconocer qué tanto estás orientando la palanca para relacionarla directamente con el viraje del auto que manejas en ese momento.

Tanto en la forma de conducción, como en las funciones dentro del juego, es imposible no compararlo con el formato al que F1 (la otra licencia oficial de EA) nos tiene acostumbrados, PERO también con ciertas diferencias que dotan al juego de un aire fresco.

Por ejemplo, en F1, que se juega siempre en pistas planas y bien asfaltadas, las condiciones de victoria son definidas por qué tan bueno eres controlando aceleraciones en rectas y frenados en curvas. Aquí, por el contrario, todas son curvas y es el mismo entorno el que te puede hacer trastabillar, pues nos encontraremos, principalmente, en carreteras agrestes o “de trocha”, que de “asfaltadas” tienen muy poco y, más bien, fomentan una conducción más errática y menos acartonada del vehículo.

Podría decirse que el título busca que te sientas vulnerable pues, así como puedes conducir en algunas secciones de pista, también treparás cerros, descenderás por nieve, surcarás charcos y realizarás saltos en baches. Todo esto acompañado por un entorno dinámico en cuanto a condiciones atmosféricas se refiere, pues no solamente la lluvia o la nieve que cae entorpecerá tu visión, sino que también la hora de la carrera (que a veces puede ser de noche o madrugada) te proporcionará una penumbra absoluta en la que la atención extrema es la clave.




EL FORMATO RALLY

Es posible que, hasta ahora, el juego pueda parecerte mucho más técnico de lo que realmente es, pero créeme que se esfuerza por hacerlo lo más digerible posible a medida que vas avanzando tu historia entre las diversas secciones y modos de juego.

Por ejemplo, tiene una “Escuela de conducción” en donde no solamente aprenderás los controles de manejo básicos del juego, sino también entenderás los fundamentos del Rally como deporte y un repaso básico sobre la terminología a utilizar.

Luego, tienes el modo “Carrera” que, antes de iniciar, te preguntará en qué categoría quieres participar, siendo las disponibles Rally1, Rally2 y Junior WRC, las mismas oficiales del Campeonato Mundial de Rally de la FIA, en el mundo real.

Una vez elegida la categoría, se te preguntará si deseas crear tu propio equipo o si quieres participar en uno existente. Si eliges el segundo, muchas de las opciones de personalización vendrán predeterminadas, casi te dedicarás únicamente a correr y ganar puntos de trayectoria. Si por el contrario eliges por crear tu propio equipo, se te asignará un asesor personal que te guiará en todo el proceso de creación de tu propia escudería desde su concepción.

Esta parte es principalmente interesante pues manejarás un presupuesto ficticio, el mismo que se incrementará a medida que superes las pruebas del campeonato, pero disminuirá con cada compra, adquisición o, quizás, mala decisión que tomes.

Los campeonatos se dividen en meses y cada mes tendrá diversas pruebas que se repartirán en semanas. Cada semana podrás elegir qué prueba se va a realizar sin opción a corrección si es que te equivocaste o dejaste algo atrás. Las pruebas pueden ir desde carreras sencillas, minitorneos clasificatorios, pruebas de invitación, pruebas sugeridas por los auspiciadores o testeos de autos. Cada prueba, a su vez, puede contener uno o varios tramos a competir. Existen, también, semanas que deberás invertir en contratar personal, reparar tu auto y/o, simplemente, mandarlos a descansar. Todo lo que hagas se verá reflejado al final de la temporada y es ahí donde realmente notarás qué tan hábil fuiste.

Es importante notar, sin embargo, que, aunque es un juego de carreras y competición, no busca precisamente que llegues siempre en primer lugar. Es un título que te impulsa hasta el final para dar lo mejor de ti. Si quedaste en un puesto muy bajo al final de temporada, no importa, pues ya aprendiste y lo harás mejor la próxima vez. No es un modo carrera que te mantenga tenso en lograr algún objetivo canónico para que puedas pasar de nivel, sino uno a que disfrutes cada evento por separado y que te sorprendas con los resultados.


VIAJANDO POR EL MUNDO

Si siempre miraste con cierta envidia a ese amigo que solo anda viajando por el mundo, ahora tendrás la oportunidad de plantarle cara y decirle: “yo estuve ahí”, aunque digitalmente... y es que EA Sports WRC te ofrece la oportunidad de competir en los circuitos más emblemáticos y desafiantes del rally mundial.

Se incluyen 18 ubicaciones oficiales del Campeonato Mundial de Rally de la FIA, en el mundo real, que abarcan países de los cinco continentes, como Argentina, Australia, Chile, Finlandia, Grecia, Japón, Kenia, México, Portugal y Suecia. Se habla, además, de una futura actualización en la que se incluirán ubicaciones extra con el Central European Rally, que se añadirá gratuitamente en una actualización posterior. En total, el juego cuenta con más de 200 tramos, que suman casi 1000 kilómetros de recorrido.

Los circuitos no solo son variados en cuanto a su localización geográfica, sino también en cuanto a su superficie y su clima. Se te pone a prueba con diferentes tipos de terreno, como asfalto, grava, nieve, hielo y barro, que afectan al comportamiento y al desgaste de tu auto. 

Además, nos encontraremos con diferentes condiciones atmosféricas, como sol, lluvia, niebla, viento y tormentas, que cambian el nivel de visibilidad y de agarre. El juego también tiene un ciclo dinámico de día y noche, que hace que las etapas sean más o menos iluminadas según la hora. Como curiosidad debo añadir que, en algún momento destrocé tanto el vehículo que me quedé sin luces altas, en una prueba de penumbra extrema, en la cual no podía ver más de un metro delante de mí. No había sentido tanto terror ni en un Silent Hill.

Cada circuito es único y su complejidad variará dependiendo de la fecha, semana, mes o número de partida en la que estés.  Muchísima rejugabilidad en este aspecto.




EL CORAZÓN DEL EQUIPO

El punto más novedoso de este título y que lo asemeja a su primo, casi hermano, F1 es que no solamente estás aquí para manejar y ya, sino también que puedes gestionar tu propio equipo de rally, desde su nombre y logotipo, pasando por colores e, inclusive, filtrando patrocinadores (de acuerdo a sus requerimientos y exigencias).

La primera persona a la que deberás escoger será a tu copiloto, un personaje muy importante en este juego dado que NO CONTAREMOS CON UN GPS COMO TAL y tendremos que guiarnos únicamente de las indicaciones de este. Estas indicaciones se hacen principalmente necesarias en entornos oscuros, cuando apenas pueden verse unos metros más adelante.

En las configuraciones puede deshabilitarse la voz de tu copiloto dejando únicamente marcas visuales en la pantalla, pero considerando que cada milisegundo en la pantalla puede marcar la diferencia entre caerte o no a un precipicio, se sugiere dejarlo activo, aunque pudiese ser cansado.

Luego del copiloto, nos veremos facultados de elegir a nuestra planilla de técnicos e ingenieros. Personajes con nombre propio y nacionalidad que tendrán diversas habilidades y velocidades tanto dentro, como fuera de la carrera. Algunos, por ejemplo, son más económicos en salario, pero les toma reparar el auto el doble de tiempo frente a otro trabajador que cobra mucho más caro.

La gestión del equipo no se limita a la elección del personal, sino que también implica la administración de los recursos. El juego te muestra un presupuesto, que se compone de los ingresos y los gastos de tu equipo. Los ingresos provienen de los patrocinadores, que te pagan según tu rendimiento y tu popularidad. Los gastos incluyen el salario de tu personal, el mantenimiento de tus autos y sus mejoras. Hay algunas misiones durante el modo campaña que, de alguna manera, te exigen ajustarte a un presupuesto determinado, teniendo que saber valorar entre mejoras o reparaciones. Muchas veces estas decisiones tendrán consecuencias en tu equipo.

Existe una barrita que mide el nivel de satisfacción de tus benefactores. Es importante mantener este nivel siempre por encima de la mitad para no caer en reducción de inversiones. Aunque esta mecánica pudiese sonar, a primera escucha, entorpecedora de la experiencia, debo decir que, así como es complicado subir tal nivel de satisfacción, es igual de difícil bajarlo.  Tendrías que ser el manco de los mancos para desagradar a los patrocinadores.

La gestión del equipo es una parte fundamental de EA Sports WRC, que te hace sentir como un verdadero piloto de rally. El juego te hace responsable de tu equipo, que depende de ti para triunfar.




¿BRILLA TANTO COMO EL ORO?

Todo lo expuesto hasta este punto ha sido casi únicamente positivo, y es que el juego sí que es divertido, pero ¿cómo se comporta en el lado estético?

Se nota el cambio de motor hacia Unreal Engine 4 pero no precisamente para bien. Aunque la distancia de dibujado es impresionante y los escenarios coquetean con el realismo en algunas ocasiones, se quedan solo en eso. Hay screen tearing y las texturas tienden a ser repetitivas y de baja calidad. Los efectos de partículas como el polvo o la nieve, aunque casi no se ven por la velocidad, son simples transparencias.

EA Sports WRC cumple con verse bien, pero no podemos decir que los gráficos sean su fuerte. Y aunque, claro, no es que tengan una importancia argumental ni jugable, pero sí que te sacan de onda los personajes humanos tan robotizados que existen como decorado.

Por una vía diferente va la banda sonora, la misma que llega gracias a la mítica EA Trax, la plataforma de mixes característica en varios juegos deportivos de EA. En esta ocasión contamos con música electrónica predominantemente, combinando tanto a artistas consagrados como de la nueva escena. Nombres como The Chemical Brothers, Bonobo, Disclosure y Caribou resaltan de entre las casi 40 canciones que componen la banda sonora. Claro, estas canciones no suenan durante las competencias como tal, pero sí dentro de los menúes y descansos entre tramos. Estoy seguro que al menos un par de nuevas canciones se quedarán en tu playlist para siempre.




¿Y LA REJUGABILIDAD?

Hay un punto que estoy dejando para el final porque me ha dejado con un sabor agridulce, a decir verdad. Es respecto al resto de contenido que tenemos en el juego.  Es cierto, hay muchos modos de juego, pero se siente como si algunos no estuviesen del todo terminados y tuvieron que publicarse con la excusa de actualizarlos después.

Podría decirse que la “Escuela de Manejo” y el “Modo Historia” son de lo mejor y lo más completo que podemos encontrar. Si recordamos líneas arriba, ya había resaltado la enorme aleatoriedad climatológica y horaria de los tramos, motivos suficientes para tener que pasarte el juego varias veces si deseas disfrutarlo bajo diversas condiciones.

Muy cerca de ahí tenemos a las habituales partidas rápidas en las que, sencillamente, eliges un tramo, un vehículo y a correr. Sin mayor miramiento. Estas partidas rápidas también pueden hacerse online y, lo que es mejor: ¡habemus crossplay!

No podemos olvidar al ya acostumbrado “Modo foto” al que podemos acceder casi en cualquier momento de nuestras partidas para, justamente, tomar instantáneas de nuestro juego. La interfaz está bastante intuitiva y, además de poder ajustarse las condiciones climáticas y añadir filtros, es posible agregar suciedad y desgaste a los autos.

Donde empiezan los sinsabores es en el “Modo Momentos” y es que, en primera instancia suena espectacular: una especie de biblioteca en donde podrás revivir, de primera fila, los mejores momentos del rally mundial de los últimos 50 años. Todos recreados con una gran atención a los detalles ¿dónde está el problema entonces? Que para acceder a todos estos momentos, se requiere una suscripción a EA Play. Sí, así como suena: pagar más por verlos.

Otro modo con el que contamos es el “Modo Club” un espacio en donde puedes formar clanes con otros jugadores para organizar torneos y eventos privados, al mismo tiempo que intercambiar puntajes, tiempos y desafios ¿interesante? Quizás ¿importante? Meh... El único y pequeño gran detalle de este modo es que debes salir del juego original, pues todo se gestiona a través de EA Racenet.

Y no podríamos olvidarnos del “Modo Constructor”: un espacio en donde puedes crear y personalizar tu propio auto. Las opciones de personalización son vastas, pudiendo no solo modificar el chasis y aspectos visuales, sino también de rendimiento como el motor, los embragues o los tubos de escape. Un modo en el que puedes pasar un buen rato creando el auto de tus sueños PERO que, apena decirlo, no está al nivel de otros juegos de corte similar. Y justo aquí llega otro sin sabor: “pases de batalla” ¿¡QUÉ!? Bueno, no de “batalla”, precisamente, sino “Pases de Rally” y es que las opciones cosméticas no vienen gratis, sino que serán de pago, a medida que estas se van a ir publicando a lo largo de todo el 2024.



Conclusión

EA Sports WRC es un juego de simulación de rally que te ofrece una experiencia de conducción realista y desafiante, con una gran variedad de vehículos, circuitos, superficies y condiciones climatológicas. El juego también te permite gestionar tu propio equipo de rally, con nombre, logotipo, personal, presupuesto y patrocinadores. Es un juego entretenido sobre todo, pero no podemos decir que destaque especialmente en el aspecto gráfico y estético. Usa Unreal Engine 4 y aunque tiene una distancia de dibujado impresionante, las texturas pueden llegar a sentirse repetitivas y muy básicas. Regresan los “humanos robot”. Muy separada de ahí, contamos con una nueva edición del EA Trax, esta vez con una colección interesante de música electrónica. Estamos ante un título que tiene mucho contenido qué ofrecer en sus dos principales modos de juego: “La escuela de manejo” y el “Modo historia”, pero que tiende a palidecer un poco en lo demás que tiene como contenido extra.


Lo bueno 

Fomenta y enseña la cultura del rally profesional.

La física de los vehículos y la respuesta de los controles.

El modo “historia” es altamente rejugable.


Lo malo: 

El resto de modos de juego no brillan tanto como el principal.

Un constructor de autos básico con respecto a la competencia.

Texturas desactualizadas y hay screen tearing.


NOTA

 80/100

Análisis hecho con un código para PS5 brindado por Electronic Arts*

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