Mientras una emite colores negros más oscuros y perfectos, la otra ofrece colores más puros. ¿Cuál elegir como nuestra nueva pantalla de juego?
Hace un poco más de 10 años solo teníamos que distinguir entre las TVs planas en LED, LCD y Plasmas. Actualmente, decenas de tecnologías han invadido el mercado, incluso algunas siendo exclusivas de alguna marca en particular. Y aunque todas son diferentes entre sí, muchas de estas coinciden en varios puntos. En esta oportunidad nos enfocaremos en saber cual de estos tipos de televisores LG son ideales para jugar, el reconocido OLED o la nueva tecnología de LG, Nanocell.
Televisores LG OLED
OLED significa organic light emitting diode. Básicamente trabaja con una tecnología de retroiluminación donde se tiene un diodo emisor de luz por cada pixel por separado. Eso quiere decir precisamente, que un video solo se iluminarán los pixeles con color, dejando los pixeles negros totalmente apagados. Como podemos ver en la imagen de abajo, todo el borde es un negro total, mientras que la imagen central destaca con un contraste más marcado, simulando un brillo mucho más alto del real. La tecnología OLED es mucho más cara que la de los paneles LED convencionales y de hecho la encontramos también en celulares de gama alta.
El problema con el OLED es que necesita que la luz de sus pixeles esté en constante movimiento. Si vamos a jugar títulos de estrategia, RTS o de gestión, seguramente estaremos lapsos grandes con la pantalla estática. En este caso no digo que desaconsejemos su uso, pero simplemente habrá que tener más cuidado.
Otro problema es que no llega a ser tan luminosa como la tecnología LCD, sin embargo en este 2022, con la revisión llamada OLED Evo, LG ofrece paneles más luminosos y con tecnologías capaces de crear algoritmos en los emisores de luz para mejorar la durabilidad de estos y no encontrarnos con pixeles quemados en un buen lapso de tiempo.
Televisores LG Nanocell
Nanocell es una tecnología para televisores exclusiva de LG para televisores LCD. Acá el panel es iluminado por LEDS azules, y a su vez, tiene una capa de nanopartículas entre la luz y el panel, que actúan como filtro absorbiendo la luz que no es útil. Como resultado tendremos una gama más amplia de colores, mejor ángulo de visión y las cualidades de brillo de un LCD, pero con cierto efecto de oscuros como el OLED. No obstante, no podremos llegar a tener negros tan perfectos como el OLED.
La tecnología Nanocell tampoco se ha quedado atrás, y como la OLED, está en constante evolución. LG ahora tiene televisores QNED, que mezclan la tecnología Quantum Dot y NanoCell para tener mejor consistencia de color, mejor brillo y contrastes más marcados.
¿Cuál es la mejor tecnología para jugar OLED o Nanocell?
Sacando de la ecuación a la QNED y las OLED Evo. Nos encontramos con dos opciones con sus propias virtudes y defectos.
Por un lado, los televisores LG OLED tiene negros más marcados, por lo que lucen contrastes sorprendentes, sin necesidad de tener nits muy altos. Aunque OLED es una tecnología cara, y antes exclusiva de la gama alta, ahora podremos encontrar OLEDs por debajo de los 3500 soles. El OLED también tiene un tiempo muy rápido de respuesta, así que para jugar shooters o juegos de acción es ideal. Y ni hablar de su bajo consumo de energía, que es un claro plus para quienes se pasan bastantes horas en el televisor. No obstante, también es un televisor al que tienes que darle descansos cada ciertas horas, si queremos cuidarlo; y también un televisor que no podrá estar mucho tiempo con una imagen estática. De igual forma es una opción más peligrosa ante el quemado de pixeles frente a un corte eléctrico.
Por otro lado, los televisores Nanocell son tecnología más económica por lo que los podremos encontrar hasta por debajo de los 2000 soles. Entre sus ventajas tenemos una imagen mucho más colorida a la LCD normal, mejor ángulo de visión y probablemente te durará más tiempo que la OLED. No obstante no conseguiremos contrastes tan espectaculares como en la OLED y gastaremos más energía.
Por lo que finalmente, si tomamos en cuenta la evolución de las OLED hasta el 2021, sería el claro ganador. Gracias a tecnologías como VVR, G-Sync o freesync, nos permitirá tener refrescos adaptativos según lo que vemos en la pantalla, y así podremos también evitar píxeles quemados. También el OLED ha llegado a abaratarse, y si aún mantiene algo de distancia con el Nanocell, ya es una tecnología más democrática. Y si hablamos de gaming, virtudes como ángulo de visión o nits por arriba de los 1000, no son tan necesarias, como una rápida despuesta o contrastes más marcados.
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